Soy Pablo Soto y "Párpados sicarios" es el blog en el que dejo registro de mis inquietudes en torno a la literatura, especialmente sobre la poesía. Podrán encontrar en las diferentes pestañas los temas de interés del blog. Allí podrán leer y comentar textos propios y de otros autores. También pueden seguir al blog en Facebook e Instagram como Parpadosicarios. En Facebook: https://www.facebook.com/parpadosicario En Instagram: @arpadosicario En Spotify: Párpados Sicarios Podcast

21 mar 2020

Alejandro Schmidt (II)*

ese perro que corre en la terraza

ese perro que corre en la terraza
es la belleza

los vecinos se quejan
ladra, ladra mucho dicen

al dueño no le importa
no tengo hijos, piensa,
no tengo nada en la vida

muchas veces olvida dejarle agua
el perro
estira su cabeza entre las rejas
va lamiendo la luz de los faros

no hay estrellas ni amantes
en esas esquinas

cerca del campo electromagnético
el perro está desnudo

espera
gruñe a todo lo que interrumpa
su miserable concentración de orejas

nunca tuve premios
se repite
su amo
subiendo la escalera

mosaicos ajedrezados
una lata vacía de dulce de batata

y la belleza
que tiembla
tiene sed.


La transfiguración

El hombre de chaqueta verde
contó una historia
mientras me cortaba el pelo

su hijo había ido a otro país
y apenas si escribía o hablaba
a ras del Mediterráneo


quizás por eso
el peluquero
se detenía de pronto
mirando sin ver
su cara de nada en el espejo

idéntica a su oficio
la historia era anodina
una anécdota doméstica acerca de la corrupción política...

Algo marchita, merced a la luz
una foto familiar  en el viso del espejo
duraba tiempos mejores

los rostros en la sala de esperas
patinaban sobre revistas ilustradas: fútbol y
corazón de estrellas...

Sentí un vergonzante rencor
por sus tijeras
que me contenían como a un peligro
también por los desprendimientos de su monólogo profesional
su barato oratorio que recortaba
otra vez
el tiempo

es decir
estuvimos media hora ausentes
en una forma tal
que no creí posible en este mundo

al pagarle me sugirió
que apreciara los matices del corte

mi cabeza es una bola de billar
me agrada pensar que parece
el cráneo del emperador Flavio

siento que podría sacármela y dejarla correr
besando todo

entonces
nos acercamos los dos y nos contemplamos

no en nuestras diferencias
sino en la melancolía de lo perdido

lo saludé mientras recogía el abrigo intocado

enérgico, un adolescente tomó el lugar y se puso a conversar
acerca de los astros que mueren en Xilenius

en la calle 
los tigres recorrían las sombras

sentí que me ceñían una corona invisible, helada,
y era adorado por demonios.



Verdad de lo evidente

¿Y su fueran ciertos los griegos
y escarbara Zeuz con un palito
en tu corazón?

Fuera narrada nuestra vida
entre lunares de un gigante
atrás del universo.

¿Preferirías la verdad
de lo evidente
esa larga marcha
en la superficie de días
con cencerros?

Y cierta
la mudez de las palabras
cierta
la música gritando desposada
y fuera amor
lo único presente
y todo fluyera
no sé adónde
salvo
esta copa crecida
por un ángel.

¿Si dios fuera cierto
y esperara
de cada acto, razón o sentimiento
una suerte de pan
abierto como el río?

Qué harías entonces
con tantos mendrugos y derrumbes...

...Si pasearan
Carlomagno, Demóstenes, Rimbaud
en tu ciudad...

Cómo te alzarías del periódico
a quién acudirías
a contar qué...

...Si hallaras un doctor de la memoria
vieras el rostro de tu padre
parecido a la lluvia
y su respuesta fuera
algo de espuma

¿Pasa el tiempo
duran límpidos los tronos
nos hace lo que hicimos
lo que no
y todavía?

¿La Historia es trágico suspenso?

El pensador llega a su cita con el caos
detesta la poesía sus poetas.

¿Si fueran ciertas las fábulas
las cumbres
los hechizos
y en cada yo
leyeran sapos los libros del espejo
mientras el Mal devora corazones?

Y dijera la esperanza
contigo no
y sí con la tormenta.

Porque tu verdad
rompe la niebla tras un barco
es aire de los polos
enigma del dormido.

¿Y cierto aquello que
en medio de la fe llamaste y nunca vino?

Futuro
tu nostalgia

ayer

el gran camino

que recién

comienza.

*los poemas fueron extraídos de Romper la vida. Antología existencial, Cosquín, Nudista, 2013. Alejandro Schmidt (Villa María, Córdoba, 1955) publicó, a modo de folletos, más de cincuenta plaquetas y libros.  Parte de su obra fue traducida al inglés, al alemán y al italiano.